¿Qué es un melanoma y cómo tratarlo?

melanoma
El melanoma es un tumor maligno de la piel que se origina en los melanocitos, es el más peligroso. ¿Quieres saber cómo tratarlo? ¡Descúbrelo con nosotros!

El melanoma es un tumor maligno de la piel que se origina en los melanocitos, las células de la epidermis que pigmentan nuestra piel.

 Es el tipo de cáncer de piel más peligroso, ya que es capaz de invadir los tejidos sanos de alrededor y extenderse hasta otros órganos (metástasis), llegando a producir la muerte de miles de personas cada año. Según el Observatorio del Cáncer, en España se diagnostican 5.500 casos nuevos de melanoma al año. 

¿Cómo se diagnostica un melanoma?

El melanoma suele ser una lesión pigmentada de tonalidad heterogénea, es decir, hay una zonas más oscuras que otras e incluso otras rojizas o rojo-azuladas. 

Los bordes crecen de manera asimétrica, por lo que el contorno es irregular. Puede ser plano o abultado, y ulcerarse en superficie, originando sangrado y molestias subjetivas como dolor o picor. En otras ocasiones, no produce ningún síntoma, lo cual retrasa el diagnóstico y facilita su extensión a distancia.

¿Qué personas tienen riesgo de sufrir un melanoma?

El melanoma puede aparecer a cualquier edad, pero afecta más a personas de entre los 35 y los 70 años. Aunque es algo más frecuente en el sexo femenino, es más agresivo en los varones.

El riesgo de sufrir un melanoma es mayor en: 

  • Personas pelirrojas, de piel clara y ojos azules, que se queman con facilidad (fototipo 1 y 2).
  • Personas con muchos nevus melanocíticos (lunares).
  • Personas que toman (o han tomado) mucho el sol.
  • Personas que han sufrido quemaduras solares repetidamente.
  • Personas con antecedentes de melanoma en otros miembros de la familia.
  • Personas que sufren alguna enfermedad que conlleve inmunodepresión (enfermedades genéticas, cáncer, etc).

¿Cómo sé si un lunar es malo?

Los nevus melanocíticos o lunares son muy frecuentes en la población general. Se caracterizan por sus bordes redondeados, su color homogéneo y su estabilidad, es decir, su morfología no cambia con el paso del tiempo. Los melanomas pueden salir sobre los lunares preexistentes o aparecer en una zona de la piel normal, sin lunar previo. 

Los signos que nos deben alertar sobre la aparición de un melanoma se resumen en la regla ABCDE, que consiste en:

  • A: aumento de tamaño en poco tiempo.
  • B: bordes irregulares o que se extienden asimétricamente por una zona.
  • C: cambio de color en algunas zonas, el crecimiento por un borde.
  • D: diámetro mayor de 6 mm.
  • E: evolución (o cambios en la evolución) .

Otro dato preocupante es la aparición de picor o escozor en un lunar que previamente no provocaba ninguna molestia.

En resumen, hay que preocuparse cuando los lunares cambian desde el punto de vista objetivo (lo que se ve) o subjetivo (los síntomas que aparecen).

¿Cómo se puede prevenir el melanoma?

Existe una clara evidencia científica de que el melanoma es más frecuente en personas que han recibido mucho sol, por lo que la exposición solar moderada y con una protección adecuada es fundamental, sobre todo en personas con piel clara y con tendencia a quemarse con facilidad. 

Las personas que tienen muchos lunares tienen más riesgo de sufrir un melanoma, tanto sobre ellos, como en la piel sin lunares, por lo que las cremas protectoras del sol deben aplicarse en toda la piel expuesta a la radiación ultravioleta.

¡Sigue leyendo nuestros posts para saber cómo protegerte bien del sol!