La irritación y el picor en las axilas es un problema frecuente y muy molesto. Diversas enfermedades pueden provocar rojez, descamación y escozor o picor en las axilas.
El tratamiento depende de la causa, por lo que es importante hacer un diagnóstico correcto.
¿Qué enfermedades pueden provocar lesiones en las axilas?
Las causas más frecuentes de picor axilar son:
- La dermatitis irritativa: una depilación agresiva, un lavado vigoroso o la aplicación de desodorantes con sustancias con mucho afecto astringente (o secante) como las sales de aluminio o el alcohol, que pueden alterar la barrera cutánea.
Las personas con la piel sensible son especialmente propensas a sufrir esta irritación. No se trata de una verdadera alergia, sino la consecuencia de un efecto mecánico o exagerado.
- La alergia al desodorante: probablemente es la causa más frecuente. Se produce cuando existe una sensibilización a los componentes del desodorante como perfumes o conservantes. Esto se traduce en rojez, descamación y mucho picor que empeoran después de cada aplicación.
Es importante tener en cuenta que esta sensibilización puede aparecer de modo tardío, y volvernos alérgicos a un tipo específico de desodorante aunque llevemos tiempo utilizándolo.
- La infección por hongos: Las axilas son una zona “cerrada” de nuestro cuerpo, por lo que tienen tendencia a acumular humedad y calor de la transpiración. Este ambiente húmedo y caliente favorece la aparición de infecciones por hongos, fundamentalmente de tipo candidiásico, provocando la candidiasis axilar. Es típica la aparición de pequeñas pústulas en la periferia de las lesiones.
Aunque algunas otras enfermedades como la psoriasis y la dermatitis atópica pueden afectar las axilas, no es una localización demasiado frecuente y el diagnóstico es relativamente sencillo si existen lesiones en otras zonas.
¿Cómo se trata el picor axilar?
El tratamiento del picor en las axilas depende de la causa que lo produzca.
Las dermatitis irritativas mejoran al suspender la causa de la irritación, pero si la inflamación es muy intensa, puede ser necesario añadir corticoides tópicos.
Si se trata de una alergia al desodorante, hay que dejar de usarlo y tener en cuenta que cualquier otro producto con la sustancia que ha producido la sensibilización volverá a producir la alergia. La identificación del/los ingredientes responsables de la alergia se hace mediante tests específicos que lleva a cabo un profesional.
Cuando la alergia produce muchas molestias, es necesario utilizar un corticoide tópico para mejorar rápidamente los síntomas. En caso de una candidiasis, deben utilizarse cremas con antimicóticos tópicos. Si quieres información más detallada sobre la alergia, accede a curatualergia
¿Cómo debo elegir mi desodorante?
Existen muchos tipos de desodorantes, con distintos componentes dirigidos a evitar la sudoración y evitar el mal olor axilar. Para elegir un buen desodorante, ten en cuenta los siguientes consejos:
- Utiliza preferiblemente productos cuya capacidad astringente o secante no sea excesiva y de esta manera irrite tus axilas.
- Elige productos que respeten el pH fisiológico de la piel y no alteren la barrera cutánea. Es el primer paso para la irritación.
- Si tienes la piel sensible, usa productos indicados para ti, como pueden ser las formulaciones balsámicas. Es la manera de evitar sustancias agresivas que tu piel no toleraría bien.
- Si usas desodorante después de la depilación, elige productos libres de alcohol para evitar el escozor y la irritación