¿Cómo saber si tu bebé tiene dermatitis atópica?
Como te hemos contado en otras ocasiones, la dermatitis atópica -o eccema atópico- es la expresión a nivel cutáneo de la atopia. Es una enfermedad crónica inflamatoria relacionada con la excesiva activación del sistema inmunitario, provocando un estado crónico de inflamación en la piel.
Es muy frecuente en los niños, apareciendo aproximadamente en uno de cada cinco, pero en la mayoría de las ocasiones desaparece al llegar a la adolescencia, manteniéndose sólo en el 3-5% de los adultos.
Síntomas de la dermatitis atópica
El síntoma más característico de la dermatitis atópica es el picor, que a veces es tan intenso que puede llegar a dificultar el sueño y producir irritabilidad.
Acompañando al picor también son comunes los siguientes síntomas:
- Piel seca, áspera, descamada.
- Lesiones en la piel, que dependiendo de la edad se pueden ubicar en cara, cuello, tronco, zonas flexoras o extensoras de los miembros.
- Enrojecimiento de la piel.
- Inflamación.
- Sobreinfección de las lesiones por bacterias u hongos.
Cómo cuidar la piel atópica en los bebés
La dermatitis atópica es una enfermedad en la que aparecen brotes y periodos de calma entre ellos, por lo que la finalidad de los tratamientos es calmar esos brotes y tratar de prevenirlos, de manera que se espacien durante la mayor cantidad de tiempo posible.
Durante el brote, será el médico quien paute el tratamiento a seguir, que suele estar constituido por pomadas, cremas con corticoides, antibióticos o inmunodepresores tópicos.
Para mejorar el efecto del tratamiento y/o prevenir futuros brotes, debemos seguir una serie de pautas en el cuidado diario del bebé:
- Utilizar productos cosméticos que le aporten hidratación y nutrición a su piel, que recuperen la arquitectura cutánea dañada, restaurando la función barrera y que le protejan de los factores externos.
- Utilizar productos suaves, sin detergentes –los llamados syndet– para limpiar la delicada piel del bebé sin irritarla.
- Después de la limpieza hay que aportar hidratación y emoliencia, con proteínas y lípidos que reparen, suavicen y refuercen su piel.
- Proteger la piel del sol con ropa, gorros, sombrillas, productos solares, y, si es posible, también de otros agentes externos que le resulten irritantes.
Productos específicos para cuidar la piel atópica en los bebés
A la hora de cuidar la piel de tu bebé es muy importante que elijas productos específicamente formulados para las características especiales de la piel atópica, que calmen sus síntomas y le aporten bienestar.
Estos productos deben actuar sobre cuatro aspectos:
- Aliviar la sequedad, aportando activos reparadores de la barrera cutánea.
- Calmar el picor intenso o prurito.
- Disminuir la irritación al proteger de los agentes externos.
- Reducir el riesgo de sobreinfección porque refuerzan la microbiota natural de la piel.