Los bebés tienen una piel mucho más fina y delicada que los adultos. Además, algunas de sus funciones no están del todo desarrolladas aún, por ejemplo, les cuesta más mantener el control de la temperatura y tienen un menor contenido en ácidos grasos que impiden que cumpla adecuadamente su función de barrera defensiva.
Por eso es muy importante que prestes más atención a los cuidados y los productos que elijas para ello. La higiene es fundamental y debes tener mucho cuidado, tanto con el baño como con la limpieza de la zona del pañal, para evitar irritaciones y dermatitis.
Lo que NO debes hacer
- Abusar de los baños: el baño debe ser corto, no más de 5 minutos, con agua templada.
- Secar frotando la piel: el secado debe hacerse a toques suaves, sin arrastrar, para no irritar su delicada piel.
- Usar tejidos irritantes: la ropa del bebé preferiblemente será de algodón, evitando los tejidos sintéticos, la lana, etc., que pueden causar más fácilmente picor o irritación.
- Lavar la ropa con detergentes agresivos: a la hora de lavar la ropita del bebé es conveniente utilizar jabones específicos, pues si se utilizan detergentes agresivos pueden quedar restos en la ropa y causar irritaciones. Después del lavado, aclara muy bien sus prendas.
- Abusar del suavizante: los suavizantes para la ropa pueden causar irritación o alterar el pH de la piel de los más pequeños.
- Temperaturas extremas: la piel de los bebés aún no es capaz de regular correctamente la temperatura corporal y por eso no debemos someterle ni al frío ni al calor. Procura que esté a una temperatura más o menos estable.
- Ambientes demasiado secos: los ambientes muy secos debidos al clima, o al uso de calefacción y/o aire acondicionado, favorecen la deshidratación de la piel.
- Productos de higiene inadecuados: es importante elegir productos específicos para bebés, sin detergentes agresivos y con un pH adecuado que ayude a proteger su piel.
- Cosméticos con activos irritantes: algunos activos, como el alcohol o ciertos perfumes, resultan irritantes para las pieles más finas como las de los bebés.
- Descuidar el cuidado de las uñas: las uñas crecen muy rápido y con ellas largas puede hacerse rasguños, así que deberás estar pendiente y mantenerlas cortas y rectas.
Los productos básicos que necesitas
Para cuidar la piel de tu bebé y mantenerla en buen estado, libre de picores, irritaciones y otros problemas, te recomendamos utilizar los siguientes productos.
Jabón sin detergente
Lo adecuado es usar jabones syndet (sin detergentes) que limpian suavemente la piel del bebé sin eliminar el manto hidrolipídico. Como su piel es deficitaria en ácidos grasos, lo ideal es usar un jabón que además sea sobreengrasante. En otras palabras, que le aporte los lípidos que escasean en su piel.
Además, es muy importante que el jabón tenga un pH adecuado, cercano a 5.5, pues la piel de los bebés es un poquito menos ácida. Por ello no está igual de protegida contra los agentes externos y usando un jabón con un pH adecuado compensamos en parte esa alcalinidad.
Champú suave
Para la higiene de la cabecita del bebé te aconsejamos usar un champú específico, que sea muy suave y no le irrite el cuero cabelludo.
En el caso de que aparezca costra láctea deberás usar un champú adecuado para ayudar a eliminarla.
Hidratante y/o emoliente corporal
Usa leches, lociones, aceites o cremas después del baño, preferiblemente con la piel ligeramente húmeda. Puedes aprovechar el momento para darle un pequeño masaje que, por un lado, ayudará a que la emoliente se absorba mejor. Por otro, será un momento de unión y relajación con tu bebé.
No debes olvidarte de hidratar también la zona facial, sobre todo cuando salgáis a la calle y si hace frío.
Crema o bálsamo protector para el culito
Puede ser una pasta al agua que, por su efecto barrera, te ayudará a que protejas su piel de los irritantes, las heces y la orina. Si no es necesario, una crema reparadora que alivie, regenere y mantenga su piel sana y fuerte para resistir mejor los agentes agresivos.
Bálsamo peribucal
Los bebés tienen tendencia a sufrir irritación en la zona cercana a los labios y la nariz, sobre todo por el efecto irritante que tienen las babas. Por eso, es adecuado contar con un producto protector para esa zona que le proteja de la irritación y le alivie si esta ya ha comenzado.
Protector solar
Los niños menores de 6 meses no deben exponerse al sol directamente, pues su piel es tan delicada que pueden quemarse con muchísima facilidad. A la hora de salir a la calle, asegúrate de que va protegido con ropa, gorro, sombrilla, etc. Y si no puedes evitar la exposición al sol, además de taparle, utiliza un protector solar adecuado para su edad.
Utiliza los productos que te recomendamos, sigue nuestras pautas de cuidados y disfruta de tu bebé y de su suave y delicada piel.