Las grietas y la sequedad labial son más que una cuestión estética pues, sin ser un problema grave, son bastante comunes, muy molestas e incluso pueden llegar a sangrar y ser muy dolorosas.
Los labios están recubiertos por una piel fina y delicada, con menos protección natural y más expuesta a las agresiones externas. Pese a esto, es justamente una zona a la que no solemos prestar la atención adecuada y que sólo nos acordamos de cuidar cuando ya han aparecido los problemas y molestias.
Causas de los labios secos y agrietados
La facilidad con la que los labios se secan está relacionada con las características de la piel que los recubre. La piel de los labios es pobre en glándulas sebáceas, que son las que aportan una parte de los lípidos que forman la barrera protectora, y no tiene glándulas sudoríparas, por lo que le cuesta más mantener las condiciones adecuadas de hidratación. Y, como no tienen melanina, tampoco pueden protegerse de la radiación solar
Esto hace que tengan una mayor propensión a la deshidratación, que la piel se rompa con más facilidad y que necesite que le aportes unos cuidados específicos para mantenerse sana y bonita.
Las altas temperaturas del verano, la mayor exposición solar, el contacto con el cloro o el salitre cuando nos bañamos en piscinas o playas, algunos hábitos cómo mordisquear los labios, humedecerlos, fumar o arrancarse las pieles levantadas, favorecen la sequedad y, en los casos más graves, la aparición de heridas y grietas.
Qué hacer, y qué no hacer, para evitar la sequedad y las grietas en los labios
A la hora de cuidar de tus labios debes tener en cuenta por un lado qué consejos debes seguir y por otro qué costumbres o gestos debes evitar.
La manera más sencilla de cuidar y prevenir las molestias en los labios es aplicar diariamente una adecuada hidratación y nutrición. Si llegas tarde con la prevención, un bálsamo reparador te ayudará a devolver a la zona el confort y bienestar que ha perdido.
Además, especialmente en verano aunque sea necesario todo el año, debes proteger los labios de las radiaciones solares. Es una zona en la que frecuentemente se nos olvida aplicar protección solar y que sin embargo es una de las que más lo necesita.
Algunos de los hábitos que debes evitar para mantener unos labios sanos son: morderlos, lamerlos, arrancar las pieles, fumar, descuidar la higiene bucal, comer alimentos muy salados o picantes.
Remedios para hidratar los labios
Fijándonos en las características que hemos comentado que tiene la fina piel de la zona labial, resulta más sencillo entender qué productos resultarán más adecuados para aportarles lo que necesitan: hidratación, nutrición y protección frente a la radiación solar.
Productos como los de la gama LETIbalm Repair pueden ayudarte tanto en la prevención por su acción hidratante, su aporte de lípidos emolientes y el efecto antioxidante de la vitamina E, que ayuda a prevenir el daño solar.
Concretamente LETIbalm Repair Stick Reparador con Spf 20 es el producto ideal para acompañarnos todo el verano, pues al incorporar filtros solares, podemos usarlo para reponer la protección, además de la hidratación, a lo largo de todo el día y no blanquea.
Sigue nuestros consejos para el cuidado de tus labios y elige productos específicos para tener un verano lleno de besos y risas sin tiranteces ni molestias.